Seguramente que a muchos de ustedes les ha tocado compartir el gusto por la música, y quizás también por el rock, con alguno de sus padres. Probablemente, también, existan canciones que les recuerdan mucho a su primera infancia y se les hacen muy nostálgicas al escucharlas.
Resulta que, tal como se podría pensar, se ha comprobado que existe una relación entre la experiencia de nuestros padres cantándonos canciones durante nuestros primeros meses de vida y su influencia directa con nuestros gustos musicales.
En un estudio publicado recientemente por la Journal of Child Language, un grupo de investigadores italianos realizó una serie de pruebas sobre un grupo de bebés junto a sus padres.
Esta investigación reveló que la mayor frecuencia de las interacciones cantadas entre padres e hijos predijo el rendimiento de los bebés de seis meses en experimentos musicales de laboratorio y ayudó a su desarrollo del lenguaje en el segundo año.
A los seis meses, se evaluó a 36 bebés utilizando un procedimiento de escucha preferencial que evaluaba su atención sostenida a las versiones instrumentales y cantadas de las mismas melodías, mientras los padres completaban un cuestionario que evaluaba la cantidad de veces que les cantaban a sus bebés. El desarrollo del lenguaje se evaluó con un seguimiento cuando los bebés tenían 14 meses de edad.
Los resultados mostraron que los niños de seis meses preferían escuchar melodías cantadas en lugar de instrumentales, y que los altos niveles de canto de los padres con sus bebés se asociaron con una preferencia por la versión cantada sobre la instrumental de la canción. Además, este ejercicio trajo ventajas significativas en los resultados del lenguaje al segundo año de edad.
Todo parece indicar que cantarle a los bebés sería una práctica muy recomendada que ayudaría a generar lazos más estrechos y una ayuda al desarrollo del lenguaje en su primera infancia.
Así que, si buscan heredar sus gustos musicales a sus hijos y seguir plantando en ellos la semilla del rock, recuerden cantarles sus canciones favoritas desde que los tengan en brazos.