En el primero de los dos conciertos que brindará la banda Placebo en Chile, anoche presenciamos el ansiado regreso, después de 10 años, de una de las agrupaciones más importantes del rock alternativo mundial y como tal, la expectación era alta.

El dúo británico comenzó con todo su retorno a los escenarios, y después de pasar por varias ciudades europeas el año pasado, este mes de marzo fue el turno de Argentina, Brasil y Chile, y ahí estuvimos presentes en esta jornada imperdible para los miles de fans que repletaron y agotaron todas las locaciones del Movistar Arena para su primera fecha.

Minutos antes de que comenzara el esperado show, ya se proyectaba en las pantallas el ya conocido llamado que hacen los británicos de tratar de evitar usar los celulares mientras dura su presentación. Lo anterior, en pos de disfrutar la experiencia y de no tapar la visual del que está viendo el concierto junto a nosotros. Sobre esto, a modo de observación y como si de un experimento se tratase, notamos menor presencia de celulares grabando pero creemos que es inevitable querer grabar aunque sea algunos segundos de una de tus bandas queridas tocando uno de tus temas favoritos… situación que innegablemente nos llama a la reflexión. 

Luego a las 21:00 horas en punto y como fue prometido, salieron a escena Brian Molko, Stefan Olsdal y compañía, y los gritos y vítores llegaron hasta todos los rincones del venue. Los fans presentes no se hicieron esperar para brindar una gran ovación por Placebo, esa que daba fin a una espera de una década por poder verlos juntos nuevamente en suelo nacional. Otros cuatro músicos completaron la alineación instrumental, dos pantallas gigantes laterales y 20 mini pantallas divididas en dos filas de fondo ya se encontraban listas para comenzar uno de los espectáculos más esperados en nuestro país.

Never Let Me Go (NLMG)” es el último y octavo disco de los ingleses y como tal, éste ha sido largamente tocado en sus recientes presentaciones en vivo. “Forever Chemicals” y “Beautiful James” del nombrado largaduración abrieron los fuegos para comenzar a calentar motores de una jornada que prometía llevarnos por el extenso catálogo de canciones que ha cosechado el dúo en 30 años de carrera. Luego hizo aparición el disco “Loud Like Love” (2013) con el tema “Scene of the Crime” y ya en este punto nos dábamos cuenta de lo bien que ha envejecido la banda y la performance del frontman y cantante, demostrando que esa voz icónica e interpretación singular siguen siendo las mismas que en sus años de más alto apogeo y fama mundial.

Hugz” del también último álbum de la banda hacía su aparición y Brian Molko saludaba por primera vez al público, el que en retorno no guardó ningún grito y aplauso para responder al británico y compañía. Del mismo disco también continuaron con “Happy Birthday in the Sky”, la cual Molko dedicó a su hermano fallecido hace un par de años, una canción llena de melancolía y de dolor que habla sobre la pérdida de un ser querido. Luego llegó el turno del primer y único tema del disco homónimo de la banda que fue presentado anoche, el cual hizo presencia con “Bionic”, un clásico con el que Placebo nos remonta a los inicios de la banda por allá por el año 1996 cuando dicho material fue lanzado. 

Otra dupla del “Never Let Me Go” continuó con el setlist, en esta ocasión fueron las canciones “Twin Demons” y “Surrounded by Spies”, ésta última una de las más conocidas del más reciente disco del dúo ya que fue utilizada como primer single de promoción en plena pandemia por allá en septiembre del 2021. “Soulmates” nos hacía un guiño hacia el álbum “Sleeping With Ghost” ya que este temazo fue incluído como lanzamiento de grabaciones alternativas de dicho trabajo y que fue estrenado en el 2016, mismo año que también hizo aparición en el álbum recopilatorio “A Place For Us To Dream”. 

Continuamos con la dupleta “Sad White Reggae” y “Try Better Next Time” del ya mencionado “Never Let Me Go”, y claro que aprovecharían de promocionar y dar a conocer su último disco a cabalidad ya que de este álbum fueron interpretadas 10 de sus 13 canciones. No obstante, los fanáticos no dejaron de cantar y acompañar a Molko sobre todo en los coros, a lo que el cantante al terminar la segunda canción gritó a todo pulmón “¡Santiago!”, provocando los gritos de sus espectadores. 

En “Too Many Friends” (“Loud Like Love”) hacía entrada magistral el piano para Stefan Olsdal, el cual mantendría su presencia por al menos cuatro canciones, similar presencia que hizo el violín de manos de la tecladista Angela Chan, mezcla que a ratos nos hacía sentir que estábamos ante la presencia de una orquesta si no hubiese sido por la base potente que mantenían los otros músicos de apoyo que también conforman Bill Lloyd, Nick Gavrilovic y Matt Lunn

Fotos por El Eme/ Lotus – Fauna Prod.

Ya nos acercábamos a la mitad del show y fue el turno de los temas “Went Missing” (“NLMG”), “Exit Wounds” (“Loud Like Love”) -que tuvo una intro electrónica al más puro estilo Placebo– y “For What It’s Worth” (“Battle For The Sun”), ésta última haciendo saltar a todos los presentes en este coro tan pegajoso y enérgico que tiene. Aún quedaban ganas de seguir disfrutando. 

El disco “Black Market Music” del año 2000, uno de los más exitosos de la agrupación británica, hacía aparición por primera vez con el tema “Slave to the Wage” y Stefan aprovechó la euforia para presentar a los músicos de apoyo que se lucieron en su misión de acompañarlos, cosa que no es menor porque Placebo no es cualquier banda. Después fue el turno de “Song To Say Goodbye” la que cierra el discazo “Meds” del  año 2006. Ese característico inicio en el piano no dejó a ninguno en silencio por su aparición y debido a esa leve presencia de los instrumentos en la primera estrofa, los cantos del público se escucharon fuertes y claros. 

Las últimas dos canciones de la primera parte del concierto merecen un párrafo propio. En primer lugar llegó a nuestros oídos el clásico de clásicos de Placebo. “The Bitter End” fue la única elegida del “Sleeping With Ghosts” (2003) para ser interpretada anoche en el Movistar Arena y cómo no, si es una de sus canciones más famosas y escuchadas. Debido a todo lo anterior, este tema no dejó a ninguno quieto y en la cancha no hubo alguno que no saltara y se uniera al unísono a ese mítico coro “See you at the bitter end”. Según nosotros, uno de los puntos más álgidos de la jornada. Pero esa euforia estaba lejos de terminar ya que continuarían con “Infra-Red” del “Meds” y el éxtasis se mantendría por esta canción insigne, que es una de las favoritas de la fanaticada y que gritó a todo pulmón “Someone call the ambulance”, sumándose a la petición que hizo Brian Molko a que todos se le unieran al coro. Un momento notable. 

En esta parte fue donde se realizó la primera pausa, una que nos tuvo en ascuas por cerca de seis minutos pero Placebo no se podía ir así. A pesar de ya haber interpretado 19 temas en casi 1 hora y 30 minutos de show, la agrupación aún tenía algo más que darle a sus fans chilenos. Y finalmente volvieron y lo hicieron con todo, donde sonó a todo cañón “Taste In Men” (“Black Market Music), la que llegó en el año 2000 como primer single del disco y de la cual hicimos banda sonora del inicio del tercer milenio. Un tema favorito que ya tan avanzada la jornada nos hizo quemar los últimos cartuchos que nos quedaban ante magno clásico, demostrando que habían cero ganas de que se acabara la noche.

El último tema elegido del “NLMG” que les quedaba por interpretar fue “Fix Yourself”, el cual coincidentemente cierra también el disco, y que sirvió como antesala para ir bajando un poco las revoluciones y poder ir preparándonos para el “amargo final” que inevitablemente se acercaba. Llegó el turno de “Running Up That Hill”, canción original de la también cantante inglesa Kate Bush, tema que Placebo incluyó en el disco “Covers” del año 2003 y que lo han hecho tan suyo por más de 20 años. Esta canción debido a su suavidad genera que los cánticos se escuchen más fuertes que nunca y se notó anoche en el Movistar Arena, aprovechando de cantar lo que ya sabíamos que sería lo último que veríamos de Placebo al menos por la jornada (ya que se presentan hoy nuevamente). 

Brian Molko cerró la canción y el setlist “jugando” un poco con los sintetizadores y efectos, y Stefan Olsdal incluso bajó por un momento para acercarse a los fans de las primeras filas, y ambos junto a sus músicos se despidieron a manos alzadas agradecidos por la presencia y aguante que hizo el repleto venue en 1 hora y 50 minutos de concierto.

Lo vivido anoche sin duda quedará en el recuerdo de todos los que fuimos afortunados de presenciar la primera jornada del triunfal regreso a Chile de los británicos después de 10 años. Una noche especial donde nos hicieron un recorrido por la larga lista de éxitos que han creado en más de 30 años de trayectoria y que fueron confirmados por un completo sold out que no dejó rincón vacío en el Movistar Arena. Placebo es una de esas bandas que estamos contentos que se mantenga vigente y con una puesta en escena de alta calidad digna de sus años. Una noche para el recuerdo de principio a fin. 

 


Produce: Lotus y Fauna Producciones.

By Maro Tapia

Redactora en Rock Legacy Webzine. Periodista, melómana y a veces me creo fotógrafa...

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

This site is protected by reCAPTCHA and the Google Privacy Policy and Terms of Service apply.